La Unión de Clubes de Fútbol de la Primera División (Unafut) convocó con entusiasmo a la prensa el pasado 3 de julio para presentar el calendario del Torneo de Apertura 2025. Sin embargo, la algarabía duró poco: apenas 24 horas después, los errores en el diseño del torneo fueron tan graves que el encargado del área de Competición perdió su puesto.

El problema central no fue menor: la Unafut no previó adecuadamente los lapsos reglamentarios de 72 horas entre compromisos oficiales, a pesar de contar con el calendario completo de la Copa Centroamericana desde semanas antes. Esta omisión encendió la mecha de un conflicto que hoy se traduce en un juego pendiente, múltiples roces entre clubes y un calendario cada vez más ajustado.

El partido que pasó de dolor de cabeza a migraña

El duelo entre Alajuelense y Cartaginés, correspondiente a la primera vuelta, se perfila como uno de los mayores dolores logísticos del torneo. Originalmente agendado para agosto, debió ser reprogramado por la cercanía entre los compromisos internacionales de ambos clubes y el cumplimiento del reglamento de descanso mínimo. Entonces fue el Cartaginés quien solicitó mover el partido, con el aval manudo.

Ahora, en vísperas de jugarse el próximo sábado 11 de octubre, el encuentro podría posponerse nuevamente. Esta vez, es Alajuelense quien eleva la petición al Comité de Competición, argumentando que cuenta con seis jugadores convocados a selecciones nacionales, número mínimo para solicitar un cambio de fecha según el artículo 86 del reglamento.

Los cinco llamados a la Mayor —Alexis Gamboa, Guillermo Villalobos, Celso Borges, Alejandro Bran y Creichel Pérez— se suman al joven Isaac Badilla, quien, aunque juega con la Sub-17, está registrado oficialmente con el primer equipo.

Convocatorias + Copa Centroamericana: la fórmula del caos

Con el reinicio del fútbol nacional tras la Fecha FIFA de octubre, la Unafut enfrenta una encrucijada cada vez más estrecha. En noviembre volverá la actividad de selecciones, y tanto Cartaginés como Alajuelense siguen vivos en la Copa Centroamericana. Los brumosos jugarán el repechaje ante Motagua y los manudos disputarán las semifinales frente a Olimpia, con una posible final entre finales de noviembre e inicios de diciembre.

En medio de ese enredo, los equipos regresarán a la acción pocos días después del partido entre Costa Rica y Nicaragua, del lunes 14 de octubre. El calendario contempla la jornada local inmediatamente entre el 15 y el 16, y el reinicio de la Copa Centroamericana del 21 al 23, con juegos de vuelta del 28 al 30.

¿Cuándo se jugará el clásico provincial?

Una de las pocas ventanas que Unafut podría utilizar para realizar el Alajuelense vs. Cartaginés es la semana del 5 de noviembre, siempre y cuando no haya más convocatorias que impidan su desarrollo.

El cierre de la fase regular está previsto para el tercer fin de semana de noviembre, pero Alajuelense podría estar en plena final internacional, con partidos entre el 25-27 de noviembre y la vuelta entre el 2-4 de diciembre. La historia reciente no ayuda: en diciembre del año pasado, la gran final nacional se jugó después de Navidad, una rareza en los torneos ticos.

Un calendario que se ahoga en sus propios errores

La Unafut deberá decidir pronto si reprograma nuevamente este duelo pendiente, en un contexto donde la planificación ha sido más reactiva que preventiva. Lo que empezó como un simple ajuste se ha convertido en un embrollo que amenaza con condicionar el desenlace del torneo.

Y todo comenzó con un calendario mal hecho.

Alajuelense vs. Cartaginés: Todo empezó por un calendario mal hecho en la Unafut