El Bayer Leverkusen dio uno de los golpes más ruidosos de la quinta jornada de la Champions League 2025: victoria 0-2 en el Etihad Stadium, ante el poderoso Manchester City de Pep Guardiola.
Detrás de ese triunfo, silencioso pero decisivo, estuvo un nombre familiar para el liguismo: Sergi Runge, exentrenador de las ligas menores de Alajuelense y hoy asistente técnico del conjunto alemán.

A sus 31 años, Runge ya vive un presente de élite. Es parte del cuerpo técnico de Kasper Hjulmand, dirige en la Champions y ayuda a ejecutar un modelo táctico que hoy tiene al Leverkusen dando pelea entre los mejores 36 clubes del torneo.

Pero su historia no comenzó en Alemania.
Tampoco en Barcelona.
Su verdadero punto de inflexión estuvo en Costa Rica, en Turrúcares, dentro del Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Liga Deportiva Alajuelense.

Este es el recorrido del joven técnico que pasó de entrenar a cachorros manudos a celebrar un triunfo histórico ante uno de los mejores equipos del mundo.

Sergi Runge celebró con el cuerpo técnico del Bayern Leverkusen la victoria ante el City.

El día que Costa Rica cambió su vida

Cuando Sergi Runge llegó al país en 2019 tenía solo 25 años, una maleta y una ilusión: crecer como técnico fuera de España.
No conocía ni a Agustín Lleida ni a la estructura rojinegra; su llegada se dio gracias a Vidal Paloma, entonces coordinador de liga menor, quien buscaba un perfil joven, preparado y con visión moderna.

Runge venía de trabajar en clubes catalanes como L’Hospitalet, Cornellà, Gimnastic Manresa y en la escuela de Hristo Stoitchkov. Su formación llamó la atención… la apuesta salió mejor de lo esperado.

En su primer año, clasificó a cuatro finales y ganó tres títulos con las categorías U-12 y U-17.
Su metodología, enfoque táctico y capacidad de liderazgo llamaron la atención de todo el club.

Era joven, pero tenía algo que cuesta enseñar: visión para desarrollar talento y un manejo analítico poco común en entrenadores de su edad.

De las inferiores al primer equipo rojinegro

En 2020, con la pandemia paralizando torneos de liga menor, Lleida decidió acelerar el proceso:
Sergi Runge pasaría al primer equipo de Alajuelense como segundo asistente y analista táctico.

En esos dos meses, trabajó con jugadores que él mismo había formado:

Brandon Aguilera
Aarón Suárez
Ian Lawrence

Fue un ascenso inesperado que le permitió experimentar fútbol profesional en un entorno de exigencia.

Pero el destino tenía un movimiento aún más grande preparado.

Sergi Runge y Pep Guardiola tras el juego entre el Leverkusen y el Manchester City.

El salto al FC Barcelona

Ese mismo año surgió una vacante en la Sub-15 del FC Barcelona.
Runge fue recomendado y el club le confirmó que su nombre estaba en la lista final.

Antes de tomar una decisión, habló con Lleida y Paloma.
Ambos le dieron la misma respuesta:
“Ni lo piense, váyase. Es el paso correcto.”

En 2020, Runge dejó Costa Rica con un mensaje que hoy cobra otra dimensión:

“Estar con ustedes ha sido la mejor experiencia de mi vida. En el otro lado del océano tendrán un amigo para siempre.”

En Barcelona continuó su crecimiento, trabajando como asistente de Sergi Milà y recibiendo formación directa del modelo metodológico más influyente del mundo.

Alemania, la consolidación: Leverkusen y dos finales juveniles

El Bayer Leverkusen se fijó en él.
Su capacidad analítica y su manera de entrenar llamó la atención de la estructura alemana.

Ya en el Leverkusen:

llevó a la U-17 a la final (2024)
repitió hazaña con la U-19 (2025)

Su crecimiento fue tan explosivo que en septiembre de 2025 se anunció lo inevitable:
Runge se incorporaba al primer equipo del club, como asistente de Kasper Hjulmand.

En el club lo definen como un “mini Xabi Alonso”: inteligente, calmado, obsesivo del juego.

Etihad Stadium, noviembre 2025: el día que su nombre dio la vuelta al mundo

Este martes, Sergi Runge celebró la victoria más grande de su carrera en la élite:
Leverkusen 2 – 0 Manchester City,
con Pep Guardiola obligado a meter a Haaland y Foden sin cambiar el rumbo del partido.

El triunfo colocó al club alemán en zona de clasificación y dejó al City en una posición incómoda, bajando al sexto puesto de la tabla general de esta Champions de 36 equipos.

Un equipo alemán compacto, disciplinado tácticamente y con un plan que salió casi perfecto.
Un triunfo que no entiende de casualidades.

Y ahí, en esa pizarra, en esas correcciones y ajustes, estaba Runge.
El mismo que hace seis años dirigía a la U-12 en Turrúcares.

Gracias @ldacr y gracias Costa Rica. Estar con ustedes en esta institución y en este país, ha sido la mejor experiencia de mi vida.

En el otro lado del océano van a tener un amigo para siempre. Un fuerte abrazo a toda la familia rojinegra. Pura Vida 🖤❤️🇨🇷 pic.twitter.com/VP8acghobn
— Sergi Runge (@sergirunge) July 3, 2020

El recuerdo eterno del CAR

En Alemania, Sergi no olvida dónde comenzó a volar lejos.

Ni el CAR.
Ni los jóvenes que entrenó.
Ni la confianza que Alajuelense depositó en él.

Y desde España, Agustín Lleida celebra su ascenso, orgulloso de aquel joven entrenador que llegó por recomendación y se fue por mérito.

Hoy, Runge entrena en Champions y se ha convertido en uno de los técnicos jóvenes más prometedores de Europa.

Y Costa Rica, sin proponérselo, forma parte de esa historia.

Leverkusen vs. City: Pep Guardiola no pudo con una ficha formada en el CAR de Alajuelense