Lo que sucedió la madrugada del domingo en barrio La California, la zona de fiesta josefina, seguirá siendo un misterio. Quizás por ahora, quizás por unos días… o quizás por mucho tiempo.

Creichel Pérez y John Paul Ruiz son inseparables en la convivencia diaria de la planilla de Alajuelense. Así como lo son Rashir Parkins y Kenyel Mitchell, por citar otro caso en un grupo que supera los 25 jugadores.

El sábado por la mañana, Alajuelense entrenó en el Centro de Alto Rendimiento (CAR), en Turrúcares de Alajuela. La práctica inició a las 8:00 a. m. y se extendió hasta casi las 11:00 a. m. Los jugadores que un día antes sumaron más minutos en el empate ante Puntarenas FC hicieron un trabajo regenerativo. Entre ellos estaban Ruiz y Pérez.

Ambos caminaron juntos por las vías internas del CAR y se tomaron fotografías con niños de las ligas menores de Guadalupe FC, rival del equipo rojinegro en divisiones inferiores. Los futbolistas se retiraron entre el mediodía y la 1:00 p. m. del sábado. El domingo, debían presentarse nuevamente a las 6:30 a. m. para entrenar y luego trasladarse al Aeropuerto Juan Santamaría, desde donde partirían hacia Tegucigalpa a las 3:05 p. m.

Domingo de carreras en el CAR… y de colerones

El domingo por la mañana, el CAR fue escenario de carreras, intrigas, sospechas y, finalmente, realidades. Se tomaron decisiones de manera conjunta, como lo explicó Óscar Ramírez este lunes en conferencia de prensa: “La decisión la tomamos entre varios sectores: cuerpo técnico, capitanes y dirigencia”.

Según supo ElMundo.CR, los primeros en llegar al CAR fueron Deylan Paz y Deylan Aguilar, ambos con señales evidentes de haber tenido una noche larga. Nada pasó desapercibido ante los líderes del camerino.

Luego llegó John Paul Ruiz. Creichel Pérez, en cambio, no lo hizo a la hora en la que había sido citado por el técnico. Apareció casi dos horas después.

Ante ese panorama, fueron los propios jugadores quienes alzaron la voz: esto no se puede permitir. Carlos Vela, gerente deportivo de Alajuelense, fue informado y de inmediato se iniciaron las conversaciones con el cuerpo técnico y la dirigencia. Se tomaron las decisiones... y empezaron las carreras.

Cuatro jugadores se bajaron del avión. De inmediato, fue necesario llamar a Demetrius Tristán, Farbod Samadian y Charles Rorstner. ¿Cómo lograrlo, considerando que Honduras solicita hoja de delincuencia a los costarricenses y visa a los haitianos, nacionalidad de Tristán?

Víctor Reyes, asistente de gerencia deportiva, tenía lista toda la documentación de al menos 35 jugadores para imprevistos. Así se logró cambiar nombres en los tiquetes aéreos: bajaron cuatro, subieron tres en los vuelos AV 318 y AV 448 rumbo a Tegucigalpa.

El lunes, los involucrados se vieron las caras

El trabajo en Alajuelense no se detiene. Rónald Matarrita, junto a Paz, Aguilar, Pérez y Ruiz, entrenaron el lunes en el CAR y este martes lo hicieron con la Sub-21 que dirige Roberto Córdoba.

Uno de los ojos de Pérez muestra una huella que no puede ocultarse: un aro morado de sangre acumulada delata que algo ocurrió en la madrugada del domingo.

En los tiempos de comida de este martes, los Deylan compartieron más con Ruiz. Pérez, en cambio, se mostró más aislado. Todos, sin embargo, han manifestado a personas cercanas que se sienten arrepentidos por lo ocurrido.

Todo ocurrió en un parqueo

La pregunta que todos se hacen es: ¿qué fue lo que pasó?

Lo único claro es que incumplieron con lo establecido dentro del grupo. No llegaron a la hora pactada y, evidentemente, pasaron la noche del sábado y la madrugada del domingo en La California. Un escenario comprensible para cualquier joven de 20 años, pero inadmisible para atletas de alto rendimiento que sueñan con trascender.

En el club no hay mayores detalles. Como dijo Ramírez: “Después del partido contra Motagua llegará el momento para conversar con quienes están en Costa Rica y ver qué pasó”.

No hay videos ni partes policiales, según informó la Fuerza Pública y la Policía Municipal de San José. Lo que se sabe es que todo ocurrió en un recinto privado cercano a la zona de bares de La Cali.

Deylan Paz y Deylan Aguilar ya iban camino a sus casas cuando recibieron una llamada: algo había pasado entre Pérez y Ruiz. Ambos decidieron regresar.

Alajuelense ya aplica su reglamento disciplinario interno, con multas económicas previamente establecidas.

Lo que no se ha contado sobre la madrugada de cuatro jugadores de Alajuelense